Pero cualquiera en su sano juicio hubiese tardado tan solo algunos segundos para saber que aquello era tan solo mera apariencia. Bastaba con verle de verdad y comprender…
Comprender que muchas veces los ojos dicen más que una sonrisa y una postura. Que el silencio también esconde anhelos y algunos miedos. Que la seguridad muchas veces es inseguridad mal camuflajeada.
Siempre había más. Al menos por momentos..
-Blueberry
👌
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Si los ojos son el espejo del alma, no cebe la menor duda que había más. Genial.
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Quizá, en estos casos, baste con no ver, con dejarse escuchar mientras oímos, vemos o sentimos el contacto. Quizá, ver sea esperar demasiado de una presunción, de esa mirada impregnada de la mirada del otro que ha sometido nuestros juicios, vacilaciones, temores infundados, y todos los espejismos en torno a los cuales se ha construido el ego que recluye al ser humano en su codicia. El silencio no es hipermétrope.
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•~…muchas ocasiones no es el “sano juicio” el que se guía, sino el equívoco sentir… es tan complejo descifrar al otro. Me gusta como empiezas y como rescatas las palabras…, cuando hablas de la “seguridad camuflajeada” vamos por ahí subiéndonos en los teatros de otros… muchas veces el engaño es más hacia adentro que hacia fuera.~•
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¿Y quién no se pone la máscara algunas veces? hay quien la lleva toda la vida, una coraza que protege su interior, un sonrisa perenne que no deja traslucir la tristeza y la melancolía, un envoltorio que no deja pasar la esencia y que el mundo confunde con seguridad y fortaleza, sin embargo, es esos casos, todo es fachada para envolver la inseguridad y el miedo a que le hagan más daño.
Un abrazo.
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Francamente, original y delicado. Me gustó mucho.
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Una breve historia, inhumana tal vez o quién sabe que sobrehumana. Con el tiempo lo descubriré.
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